"Enfermo"

-No eras tu quien decía siempre que estabas acostumbrado a esto..-Retó mirandole retador...sin soltarle del abrazo...

auch, golpe bajo.

-duche!-exclamé enarqueando una ceja-mira que me saliste extorsionita y todo-comenté arrogante-pero si, tienes razón, además, no le temo a lo retos, pequeño-concluí besandole suprficialmente

Sonrie en el beso...volviendo a repetir este acto...

-Entonces te quedas-Afirma separandose por fin, dirigiéndo al armario empotrado, y sacándo un pijamita tipico de niños...

-Ire a cambiarme al baño, tu...no se, tengo mas pijamas pero dudo que te entren...

-a mi me parese ma que obvio que no me quedaran-dije-descuida, yo estoy bien así-terminé, de todas formas no creo que pueda dormir.

Se cambia rapido en el baño y luego vuelve a su habitación, sonriendo mostrandole su pijama, que en cierto modo le quedaba bastante ancho...
Se dirige a la cama algo rápido se deja caer en ella...estaba contento...se incorpora, hasta sentarse y le extiende las manos al albino...

-Kei...vamos a dormir...-Susurra llamandole con una sonrisa, para que viniese hasta sus brazos.

aquel gesto me pareció bastante tierno, realmente el pequeño lo era, demaiado tierno como para darte el lujo de hacerle daño, me acerqué a él apoyando la espalda en al cabecera de la cama y abrazandol suavemente para guiarlo a mi regazo acariciandole suavemente el cabello con gesto pausado.

Sus gestos y caricias de verdad le gustaban...eran tierna...y pausadas...y cuando lo acercó a su regazo, podia distinguir bastante bien el latido de su corazón, lento, tranquilo...

-Kei...te quiero...-Susurró acurrucándose un poco más a él...

no pude evitar que una uave sonrisa me saltará de los labios, realmente m sentía incapaz de decirle lo mismo, es una palabra que nunca le he dicho a nadie y me pesa batante el decirlo, mas sin embargo m acerqué a el un poco y deosité un beso en su frente esprando que con ese gesto entendiera lo que trataba de decirle

Sonrie...la verdad es que nunca esperaba que Keiser le dijese que loamaba...mas no lo necesitaba, por que con sus gestos bastaba...y tambien sobraba...mas no descartaba la posibilidad que un dia llegase a decirlo...aunque muchos murmuraban...que en el amor las palabras a veces iban vacias, así que los gestos ayudaban...

Keiser, no era una persona de muchas caricias, más no dudaba en mostrarselas cuando este las necesitaba.

suspiré lentamente concentrandom en continuar acariciando su cabello mientras mi mente trabajaba a mil por hora, había tomado demaiadas precausiones para evitar presisamente esto, y ahora me doy cuenta de lo inutil que fue, m esentía tan comodo que, ralmente no me interesaba mucho si esto podría ponerle en peligro, de ser así, yo ya sabría como atenerme a la consecuencias, no me daría el lujo de permitir que "eso" le hiciera daño.

Poco a poco y sin poder evitarlo...sus ojos se fueron cerrando...con una sola imagen en su cabecita...y era esa sonrisa que momentos antes su amado Keiser le habia mostrado...

Sin casi pretenderlo, fue atrapado por los brazos de morfeo, y llevado al paraiso de los sueños.

sentí como su peso aumentaba ligeramente haciendome sber que el pequeño s ehabía quedado dormido, ma sin embargo no me moví de mi posición, y no dejé ni por un momento de acariciar su cabellos.


CERRADO