Lectura para pasar el rato...

- Ah, pues... me parece bien - acepté su invitación encantado - así luego podremos buscar un sitio en el que quedarnos a ver si con un poco de suerte encontramos a más gente y jugamos a algo - comenté pensando en un posible entretenimiento que se me había ocurrido y que sería perfecto para alguien como Hinata. - Cuando quieras podemos ir - le informé mirándole con una leve sonrisa por su gesto tan amable, creo que el paseo sería divertido.

-Bien, más depende quienes son, hay algunos alumnos con los que no quisiera toparme por nada..-Dije pensando en cierto ojiambarino, la verdad no le odiaba ni nada, pero no nos llevabamos para nada bien.

-Pues, tu dime por donde quieres comenzar el recorrido, hay muchos lugares que se pueden explorar, claro ecepto el sector femenino...-Hasta ahora el unico lugar donde no podía entrar, aunque tampoco es que quisiera.-Así que..decide, que quieres conocer primero..- Dije esperando a su respuesta mientras me encaminaba hacia la salida, notando que ni un alma habitaba el sitio.

- Veamos... la verdad es que a la zona masculina de los salones y la enfermería no es que tenga especial agrado en visitar... En la zona común... el patio queda descartado, así que nos queda... ¿la zona de juegos y una sauna o algo así, no? Pues es que no se me ocurren más sitios... - hablaba mientras seguía pensando lo que era bastante difícil porque no conocía bien el lugar ni las normas, aunque tampoco es que en algún momento hubiese pensado en cumplirlas - oye... tampoco he estado aquí nunca y no conozco los exteriores... ¿dejan que salgamos? Podríamos ir a dar una vuelta fuera y me enseñas un poco esto - sugerí siguiéndole los pasos hasta la puerta con esperanza de poder salir fuera, ya que si iba a pasar tanto tiempo dentro acabaría aburriéndome.

/No te preocupes, no eres el unico que piensa así..-Dije sin más, estando ya fuera de la biblioteca, notando si había alguien recorriendo los pasillos...-Bueno, si quieres podemos ir a esos 2 sitios, pero notando como esta ahora la biblioteca, ten por seguro que esos sitios estaran igual de olvidados...-Posiblemente estuviesen ocupados con los estudios, aunque de momento no estabamos en época de exámenes ni nada, eso si que era extraño.

-Y si, se supone debemos salir con un adulto, pero bueno, yo he logrado salirme de aqui por el jardín, así que, ¿Te atreves a romper esa pequeña regla y seguirme, o prefieres visitar la zona de juegos y clubes?-Sugerí retadoramente.

- Estás loco si crees que pienso quedarme aquí un segundo más, no hay norma que no me resista a romper... - desafié su duelo pues no pensaba acobardarme por una memez de regla - Además no hay nadie, así que ni nos verán y si lo hacen... la verdad es que me importa bien poco lo que me puedan hacer... Pero tú te ves demasiado... niño bueno ¿en serio quieres ser un niño malo? - le pregunté con burla mientra le seguía afuera.

-Si, soy un niño, más no deberías tratarme como tal...-Dije ignorando su burla, en verdad comenzaba a salir mi lado egocentrico, y la verdad eso no me agradaba, preferia actuar con arrogancia a eso.

-Además, el termino malo en si no existe, solo depende del punto de vista en que se vean las cosas y yo lo veo como un recorrido turistico del sitio..-Comente sin más.

- Uhm... yo que tú no pediría que te tratase como un adulto, podría ser peligroso, niño...- le respondí remarcando la última palabra con el mismo tono de burla.

- Ahí te doy toda la razón... Y como el niño bueno y amable que eres, es tu deber acompañarme - contesté con superioridad mientras nos dirigíamos a Dios sabe dónde.

-¿Peligroso, y eso por qué segun tú?...-Pregunte arrogantemente, a mi el peligro no me asustaba en lo más mínimo, no importaba que fuese, siempre recivía todo de frente, mi único temor, era sentir de nuevo dolor, dolor al perder a alguien importante, más al ser yo, trataba de vencer ese miedo.

-claro, bueno, siempre lo soy..-Dije dando a notar mi gran ego, el cual gracias a cierta persona, como que ya había incrementado un poco más.

- Jaja no quieras saberlo - le advertí mientras me rascaba la nuca nerviosamente - Y dime, niño bueno... ¿a dónde vamos? - pregunté con curiosidad, ya que no tenía ni idea de por donde deberíamos salir - oye... también podrías llamar algún amigo tuyo, apenas conozco gente de aquí por haber llegado nuevo - le sugerí con la esperanza de que aceptase o al menos, que tuviese un amigo ya que con ese caracter que a veces se cargaba... pero supongo que a nadie le importaría estar con alguien tan lindo como él por muy arrogante que pudiese ser.

-¿Por qué no, tan malo es?...-Pregunte con desden, la verdad su palabras me habian dejado curiosidad...-Pues, primero que nada, salir del edificil..-Dije sin más...-¿Amigo, tan aburrido soy?...-Pregunte em broma mientras me pensaba en alguien...-Bueno, tengo uno, pero si lo que quieres, es que deje de actuar de forma arrogante, con el, creeme que solo será peor...-Comente, pues a la unica persona que tenía en mente era a Raiku, quien posiblemente, en el comedor se hallaba.

- Oh, no... No pienso enseñártelo - le negué como un adulto que regaña a un niño, pues no pensaba caer en su juego a retarme a hacerlo - Como eres un niño, no puedo tratarte como a un adulto, no sería decente - le expliqué con fingida madurez, aunque realmente... no es porque fuese o dejase de ser decente, sino que... no quería acabar en enfermería o aún peor... en el correccional de menores por acoso... De solo pensarlo se me ponía los pelos de punta ¡así que no pensaba caer en su juego, por una vez en mi vida actuaría con cautela y pudor!

- ¿Aburrido? - repetí sin creerlo - ¿Bromeas? Hace tiempo que no conseguía estar así con alguien, me alegra estar contigo hablando - confesé tal y como lo sentía, ya que no quería que tuviese una idea equivocada - Tampoco he dicho que no me guste que actúes de forma arrogante... Al contrario... - me inicié a explicarle olvidando mi faceta seria e inconscientemente dándole un tono de dulzura a mi voz - Siempre he creído que... las personas, al ser tan heterogéneos, tenemos multitudes de facetas... como si cada una de ellas fuese otra personita... Y cuando se quiere de verdad a una persona... llegas a querer hasta los momentos más desagradables de ésta, ya sea su parte egoísta, depresiva, prepotente, furiosa o arrogante... Nada de eso me importa porque nada hará que deje de querer a esa persona hasta su última célula... - finalicé sin ser consciente de mis palabras que salieron por sí solas reproduciendo en sonidos lo que mi corazón sentía...

-Bien, como digas..-Respondí secamente, aún tenía curiosidad claro, más si no iba a tener respuesta de su parte, no insistiría, mi orgullo ganaba por sobre mi curiosidad...-Solo dejame decirte algo, puede y no me trates como un adulto porque, como dijiste, no lo soy, pero tampoco me trates como a un crio, el echo de que seas mayor que yo, no te da el derecho..-Dije sin más, las personas que podían hablarme como quisieran, o casi siempre, eran aquellas que de una u otra forma se ganaban mi respeto y de momento, el chico que me acompañaba, no se lo había ganado, al menos no aún.

-Si, lo se, mi compañía alegra a la gente...-Dije arrogantemente, aunque actuar de esa forma, no era lo indicado para el momento. Dejando de lado ese ego mio, algo odioso, termine de escuchar atentamente a Yu, quedandome algo pensativo con respecto a sus palabras...-Eso...me alegra...-Dije con un tono algo melancólico, mientras le daba la espalda, hasta ahora los unicos que habían aguantado de mi compañía, habían sido mis padres, pero ellos, ya no estaban conmigo.

- Lo entiendo y lo siento - me disculpé sinceramente con él - es una mala costumbre mía... No te lo vas a creer, pero en toda mi vida he tratado con alguien menor que yo - confesé reprimiendo una leve risa por tal estúpido hecho - Y tengo la manía de tratar a las personas como niños cuando les tengo confianza, ya que yo siento que al tratarlos como tal, ellos actuarán como niños... de nuevo con inocencia, sin odio y olvidando las estupideces que cometimos de mayores. Al menos yo lo siento así, aunque sé que no es una buena filosofía pero no puedo evitar usarla... - terminé de contarle, hecho que me extrañó, ya que en lo que llevábamos hablando he dicho cosas que jamás las había contado a nadie - Ahh - suspiré con nostalgia - como me gustaría volver a ser un niño... - dije más para a mi mismo con anhelo mirando el interesante techo mientras seguíamos caminando hasta que caí en un pequeño detalle - Oye, Hinata, a todo esto... No me has dicho que edad tienes... - le pregunté indirectamente con curiosidad, aunque por su aspecto le había echado 11 o 12 máximo.

- En el fondo no soy como aparento ser - le aclaré pues hace unos segundos atrás se había abierto mi verdadera persona y eso en parte lo odiaba - Y tú... tampoco eres como aparentas... ¿me equivoco? - pregunté un tanto ido sin ser consciente de mis palabras - ¡Lo siento, no quise decir eso! Olvida lo que dije, perdón - me excusé al darme cuenta del atrevimiento, ya que extrañamente no quería que se molestase, no ahora... Maldije interiormente mi gran bocata que a veces no sabía quedarse callada, lo que empezó a ponerme terriblemente nervioso buscando una forma para enmendar mi falta - Etto... ¿te gusta el chocolate? - bravo Yu... no se te ocurría una idea mejor... - Si quieres... podemos ir a... una confitería... y-yo invito - y ahora por qué diablos me ponía nervioso... a saber lo que este pobre chico estará pensando de mí... Pero bueno, al menos conseguí cambiar de tema, malamente, pero lo conseguí ¿no?

-No hay necesidad para que te disculpes, cada quien tiene su propia forma de ver las cosas, solo que como tu, yo no estoy acostumbrado a que me traten como un niño, ni desde más chico llegaron a tratarme así.-Dije, pocas veces mi madre era quien recordaba que aún era muy pequeño, más era cosa rara en ella, sobre todo en mi padre y demás familia, aunque eso, realmente no me importaba, al menos no mucho...-Y bueno, yo si he tratado siempre con personas mayores que yo..-Complete.-Es raro que alguien me lo pregunte, por lo regular nunca prestan atención a mi edad, pero bien si quieres saber..-Me detuve por unos segundos, volviendo la vista a Yu.-Tengo 14..-


-Y no, la verdad suelo ser mucho peor..-Dije algo burlón..-No, la verdad rara vez suelo ser honesto, al menos por completo, odio a los que mienten, es por eso que siempre procuro decir lo que pienso o siento, más no siempre es fácil exteriorizar algunas cosas..-Respondí, ignorando sus palabras, después de todo, él igual estaba contandome acerca de el, lo justo era responder.-Y si, me gusta..-Conteste reanudando la caminata..-Claro, acepto tu invitación, solo deja te aclaro que soy algo caprichoso a la hora de escoger las cosas que me gustan.-

- Vaya... - dije con pena porque jamás hubiese recibido ese trato, pues ni un genio deja nunca de ser un niño aunque no lo tomen como tal. - Bueno, a mí no es que no me hayan tratado como un niño... En realidad era un crío consentido y mimado, no paraba de hacer berrinches a cada cosa que no me gustaba, hasta obligaba a todos a hacer lo que yo quisiese con amenazas o chantaje emocional. Realmente era muy egoísta y avaricioso jaja - le conté sin poder evitar soltar una leve risa al recordar cómo era antes, la verdad, si pudiese volver en el tiempo me gustaría hablar con ese pequeño que fui y abrirle los ojos - Incluso... hace unos años me escapé de casa - dudé en seguir mientras hablaba aunque la duda no se reflejase en mi voz, pues intentaba mantener la calma, pero no lo estaba en absoluto, ya que era la primera vez que le contaba esto a alguien, en estos años jamás me había atrevido - y podría decirse que a partir de ahí fue que cambié y deje de comportarme como un niño mimado... Las cosas cambian mucho y aún más las personas.

Repentinamente, al oír su respuesta, mis pies se paralizaron quedando mi cuerpo parado sin movimiento alguno, sólo mis ojos que se abrían en demasía - ¿Ca...cator...ce? - pregunté mientras lo asimilaba, aún sin creerlo - ¡¡Ehh!! ¡Pero si parece que tengas 11! - admití mientras le miraba atentamente tomándolo del rostro y palpándolo sin recato intentando creer lo que me decía - No puede ser... pero si... entonces solo nos llevamos un curso - aparté las manos de su cara antes de empezar a incomodarle demasiado.

- Uhm... entonces de verdad me encantaría ver como eres realmente, mientras más malo, más me gustarás - conteste con el mismo tono burlón - Oh... - fue lo único que de momento se me ocurrió decir, pues no me esperaba esa reacción de su parte y menos que dijese aquello, pero siempre he adorado las sorpresas y esta no es la excepción - Pues en eso estas de suerte... ya que yo aunque quisiese, me es imposible poder mentir y lo digo sinceramente. Lo sé... exteriorizar a veces sí que puede volverse un fastidio - le di la razón con un largo y pesado suspiro.

Tras escuchar su respuesta no pude reprimir una sonrisa que surcó por sí sola - Que bueno - le dije con alegría mientras corría a su lado y posaba mi brazo sobre su hombro mientras lo atraía animadamente hacia a mí - No te preocupes, por hoy haré una excepción y te consentiré todo lo que tú quieras, cualquier capricho que tengas, sólo házmelo saber - le ofrecí cordialmente pues siempre que me comportaba así, una inmensa paz invadía mi interior, como si poco a poco se fuese limpiando mi alma.

-Puede que haya sido tratado así, pero no por eso pude evitar ser como soy hasta la fecha. A lo que me refiero es que digamos que, mi infancia no fue muy normal que digamos, tuve todo lo que quise, y aun puedo tenerlo, más mis padres nunca actuaron como tal para conmigo, solo contadas ocasiones..-Dije de lo más normal, porque almenos para mi si lo era. Queria a mis padres sin importar nada, más por shaber sido asi, es que me era dificil poder exteriorizar sentimientos, tales como cariño facilmente.

-Si, por muy grandioso que parezca, tengo 14.-Conteste algo molesto, algo que me molestaba más que ser tratado como un niño, era que me creyeran más chico de lo que realmente era.-Y con respecto a eso, no creo que quieras conocerlo, a veces suelo lastimar a las personas sin siquiera tener esa intención.-Y he aqui una de las razones por las cuales solia ser odiado y claro estar todo el tiempo solo.

-¿Estas seguro de eso?, como te dije antes, suelo ser muy especial a la hora de querer algo.-Dije mientras pasaba mis vista a todos lados, buscando que no hubiese chismosos asechando a sus compañeros, esperando a que alguno rompiese alguna regla e ir a con algún profesor y darle la queja.-Pero bueno, primero que nada hay que salir por completo del colegio, ya después veremos si eres capaz de consentir todos mis caprichos.-Comente.


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Sorry si se ve muy rápido el post, originalemente era de como unos 20 renglones, pero cierto problema con la Lap, hizo que se borrase =w=U#

- ¿"Quería"? - pensé extrañado porque hubiese hablado en pasado - ya veo... - aún con la duda en mi cabeza sin saber sin debía o no preguntar - Dijiste... que querías a tus padres... ¿es que pasó algo? - me atreví finalmente, ya que como anteriormente le había dicho, si no deseaba contestar algo, sólo debía de decirlo.

- Tranquilo, no eres el único al que le echan menos años - contesté con desagrado al recordar a mi compañero de habitación cuando creyó que era de 1º - aunque supongo que eso es bueno... luego te alegras cuando eres viejo y la gente te quita años, así que lo llevo con orgullo - dije con gran prepotencia.

- Nos parecemos en eso... Me refiero a lo de hacer daño sin querer - aclaré al escuchar sus palabras. Al principio parecíamos dos polos opuestos pero conforme he ido hablando con él he visto que no somos tan diferentes a como parece, sólo que cada uno optó por defenderse de las cosas que pasan a nuestro alrededor de una postura diferente y la mía, a diferencia de la suya, fue la cobarde, pues al menos él parecía no aceptar todo lo que el destino le presentase y luchar por lo que quería.

- Seguro, ya te he dicho que no hay ningún problema - afirmé con gran seguridad, pues ¿tan difícil podría ponérmelo? Ya me entró la curiosidad por saberlo, espero que me la ponga difícil pues me encantan los retos - Ya creo que voy a poder... - Después de hoy vas a querer contratarme como tu mayordomo y no desear separarte de mí nunca más - le contesté con altanería - Bueno, tú eres el experto, tú dirás por dónde salimos...

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Descuida, no lo sentí apresurado ^^ Por cierto... ¿deberíamos de abrir ya otro topic en los exteriores?

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