Conociendo los Alrededores...

Sonreí con suavidad al notar que me evitaba, Enseo parece no ser tan centrado como se hacía creer, sin embargo no pude dejar de fijarme como los ojos del pequeño Ryo se aguaban con rapidez y me preocupé si, pero creo que debía dejarlo ir, mas si Enseo que parece conocerlo mas va con él me sentiré mas tranquilo.

-Ve con él-digo tranquilamente cerrando los ojos y aun asi puedo notar su incertidumbre, -has de tranquilizarlo, no querras ver a un psicologo enojado, tendemos a ser sádicos-dije para que le quedara bien claro que si no iba él pagaría el daño que sufriera ese pequeño al encontrarse solo.

Esbocé una sonrisa socarrona.

- Sí, sé a lo que se refiere - solté -. Hasta luego, Aldric-sensei.

Y sin perder más tiempo, corrí tras Ryo. En un momento logré verlo corriendo sin mirar hacia ningún lado en específico. De hecho ya estaba bastante lejos del camino que llevaba a su habitación...

- ¡Ryo, aguarda! - le pedí.

Al escuchar mi voz se detuvo y logré darle alcance en un par de segundos. Cuando lo vi con la vista baja algo en mí pareció romperse y sin pensarlo lo abracé por detrás.

- No me preguntes qué hago - murmuré a su oído, sintiéndolo temblar entre mis brazos -. Sólo desahógate todo lo que quieras, no te conozco y por eso no sé cuáles son todas tus debilidades, no tienes nada por lo cual preocuparte porque no pienso interrogarte, Ryo...

¡Ryo, espera!-Eneos me habia gritado, me detuve y al instante senti como me abrazaba por detras, eso hizo que me sorprendiera y me sonrojara de golpe, mas no trate de safarme, despues me suzurro algo que me hizo poner mas rojo de lo que ya estaba, -N-no me dejes solo-le dige mas por que a el? apenas lo conocia no?, pero tenia la sensacion de que ya nos habiamos visto antes.su consuelo hizo que pudiese deshaogarme por completo auqneu no sabia el motivo por el cual lloraba.

Afortunadamente nadie había pasado por este corredor. De hecho era muy poco frecuentado durante ésas horas porque eran horas libres que nadie desaprovecharía tomando el camino hacia la biblioteca.

Ryo había sollozado en silencio fuertemente abrazado a mí, mientras yo acariciaba su cabello y lo mantenía bien cerca de mí. Sin duda jamás dejaría que cualquier otra persona lo lastimara o lo viera en ese estado, pero para lo que ahora el pequeño tenía se resolvería con el tiempo y con él poniendo de su parte...

- ¿Sabes, Ryo? El día en que te vi por primera vez fue en mis sueños - musité, sonriendo luego de ver que había atraído toda su atención -. No lo digo sólo porque vi tu silueta, sino porque de algún modo lo que tus ojos proyectaban me hizo saber que eres la persona que de verdad necesitaba conocer.

Ryo se sonrojó, pero no desvió la mirada. Tal como un pequeño gatito, su curiosidad era más grande.

- Perdona que no me presenté con propiedad, mi nombre es Ichinose Enseo - me presenté, todavía sin soltarlo del todo -. Y, si me lo permites, me gustaría ayudarte a ser feliz...

Aquellas palabras me hicieron sonrojar de nuevo mas no aparte la mirada.
-Mi nobre es Ichinose Enseo-su nombre no se me hizo conocido, por lo que pense que a la mejor solo a la mejor y yo tambien lo habia conocido en sueños, pero no recordaba nada a pesar de esforzarme-s-soy R-Ryo Sohma.-le respondi mas en gesto de cortesia por que como habia notado momentos atras el ya sabia de mi.Su ultima frase si logro que desviara la mirada, con el me sentia diferenta a cuando estaba con Aldric -sensei, su forma de hablarme era suave y en cierta forma me gustaba, ya que al parecer solo tenia esa gesto a con mi persona.

Sonreí ante el atisbo de timidez que no desaparecía.

- No tienes que responder ahora, sólo dame la oportunidad de mostrarte que puedo hacerlo - invité, soltándolo un poco -. Pero por ahora debemos ir a tu habitación para que descanses, está algo lejos de aquí y estos pasillos son engañosos para los recién llegados.

Asintió y ambos retomamos el camino de regreso hacia los dormitorios. Mi sorpresa aguardaría sólo un poco más...

- Ryo, ¿está bien si te tomo de la mano?

- Ryo, ¿está bien si te tomo de la mano?-me sonroje ante tal pregunta, croe que esto se esta volviendo un habito en mi.-eh!..s-si..-.le respondo algo nervioso y despues tomo su mano, su semblante me traia un poco de tranquilidad, me recordaba mucho a esa persona, en la caminata no hablamos casi nada, ams no era incomodo, pero de un momento a otro el silencio fue roto.-*ggggr*..-me sonroje de inmediato, habia sido mi estogamo el que habia hecho aquello, Eneos solo me miro soprendido y depues empezo a reir, hice un puchero por aquello cosa que hizo que se riese mas -Te ves lindo asi!!- fue lo unico que dijo y al parecer estaba empezando a tenerle confianza ya que no solte su agarre, y mi orgullo ayudo un poco para responder.-Q-que tiene de lindo!-.dije ladeando mi cabeza aun sonrojada.

Sin dejar de reír, me agaché en cuclillas para mirarlo y lo tomé por el mentón con suavidad, enfrentando nuestras miradas.

- Es lindo que sólo muestres esa forma de ser conmigo siendo que llevamos menos de dos horas de conocernos - respondí, subiendo ligeramente para depositar un beso en su frente -. Creo que mejor vamos al comedor primero.

Esta vez fui yo quien lo tomó de la mano y nos dirigimos al comedor. Nunca antes pensé que podría comportarme de esta forma sin que hubiera de por medio algún interés...

Ryo provocaba todo esto en mí tan naturalmente...

Al parecer se dio cuenta, lo supe por su afirmacion, despues de su beso me tomo de las manos y eso me hizo esbosar una sonrisa, cosa que no supe si noto o no el mayor.Simplemente me deje guiar por su mano hasta el comedor.



CERRADO