After School (Heandel)

-creo que me consta el hecho de que no te importa loq ue la gente piense de ti- dije simple, seguro de lo que decia- y no creo entender tus intenciones- agregué luego. y la verdad no me gusta cuando no entiendo algo, pero esperaré a ver que haces, tal vez luego sepa que es lo que te traes entre manos, porque estoy casi seguro que tus intensiones se han transformado- dije y le sonreí simple.

-y dime...cambiaría eso en algo todo el progreso que he llevado hasta este momento con mi experimento?...según tú en que cambiaron mis intensiones?

no se, se que quieres sacarme reacciones, o hacerme sonrojar- le dije, al menos era loq ue habia descubierto hast ahora- pero ahora me parece que lo que quieres es llevarme a la cama- le miré fijo a los ojos, y sonreí sabiondo- afirmalo o niegalo, no cambiará lo que creo.

-de acuedo, buena observación la primera-concedí-en cuanto a la segunda, si lo afirmo que?

- si lo afirmas nada- le dije simple- igual no cambiaré mi resolucion, e igual tendras que esforzarte- comenté sonriendo divertido- pero igual no te pido que lo afirmes, una vez estoy seguro de algo es 99% probable que sea cierta, y no lo digo por parecer arrogante, mas bien porque me baso en observaciones previas- comenté, mirandole a los ojos.

-ya-asentí pensativo, curiosamente ya se me estaba olvidando mi propio objetivo-otra pregunta señor sabiondo. ¿que he hecho yo, a parte de insinuarme de forma directa que te haga creer que es cierto o falso lo que digo?-sonreí anigmaticamente-pero quien sabe, a lo mejor y resulta gratificante para los dos.

me encogí de hombros- la observación no se trata de ver solo lo que esta a la vista- le expliqué simple- sino, de ver mas allá, asi que no puedo decirte que es algo que hayas hecho- le respondí, otra vez me aburria.

-ciertamente...pero igual e insisto, seguro que no quieres intentarlo, te prometo que no dolerá...bueno, lo disfrutarás mas de lo que lo sufrirás-sonreí-y te asegura que querrás que vuelva a robarme la manga pastelera, aunque hay otros lugares igual de interesantes como mi cama, por ejemplo un aula vacia podría ser el escenario perfecto para cierto fetiche que tengo.

levanta una eja- una aula vacia?- repite como sin creerselo- quieres decir? igual que esta?- pregunto mirandole mientras le escudriñaba- a ver, dime, de que se trata ese fetiche?

-te diré, te diré-sonreí-pero solo con una condición, tienes que prometer dejarme cumplirlo al menos en parte

sonrie ladino, le atacaba por donde mas le dolia y sin saberlo, su curiosidad. -bien, en parte- repetí, cruzandome de brazos y esperé a que me dijera.

-genial-sonreí como un niño con su dulce favorito, en realidad, de todos los fetiches, el mío era el mas común y el mas sano de los que se practican dentro de un aula escolar.

me levanté de mi lugar y me acerqué a las ventanas corriendo las cortinas y dejando el aula en una ligera penunbra, lo que menos me interezaba era que alguien nos viera, entonces regresé a mi lugar y lo levanté de su asiento-sientante aqui-le dije acomodandolo sentado en el escritorio.

fruncí el seño al ver el movimiento, y cuando cerró las cortinas tuve que acostumbrarme al cambio de luz. Me acomodé según me indicó y visualicé su figura, esperando a ver que era loq ue haria. Por un momento pensé que tal vez quería hacer un strip, y me divirtió la idea por un momento, pero la descarté.

-y bien..?- pregunté luego.

-desesperado?-sonreí-pues bien, a diferencia de lo que crees, este es el único fetiche común y ligeramente sano que tengo en mi macabra mente así que sientete agradecido de que formarás parte de el mas normalito de todos-puntualicé. me acerqué a él acomodandome entre sus piernas que abrí con las manos para tener mas acceso a su cuerpo, simplemente me acomodé tan cerca que nuestras entrepiernas se rozaron mientras hacía que sus muslos rodearan mi cintura-quieres continuar?-proferí curioso sin retirar las manos de sus muslos.

bien, debía admitir que casi me hace sonrojar, sin embargo lo que me habia dicho antes, eso de la normalidad, hacia que sintiera que no intentaria nada extraño, asi que tomé confianza- bien, continua, tengo demasiada curiosidad por saber que es lo que haras.- le confesé aun mirandole.

-la curiosidad mató al gato Isaac-comenté sonriente-pero bueno, ya que accediste-terminé de acercarme mas si era que se podía a su cuerpo y me incliné sobre su rostro besandole al principio con suavidad sobre los labios mientras me dedicaba a delinear el inferior con lentitud logrando que entreabriera la boca, mientras el beso se hacía mas profundo y mi lengua exploraba su cabidad bucal una de mis manos subió de sus muslos a sus caderas.

al principio el primer impulso que tuve fue el de alejarme, pero yo había dado mi concentimiento y no era de los que se arrepentian luego de decidir algo, asi que encaré la situación y le respondí el beso, extrañas descargas electricas se sentian en mi cuerpo, pero las ignoré y me concentré en la situacion.

le sentí responderme al beso y, deliberamente decidí pasar a la siguiente étapa, tras un instante me instalé comodamente en su cuello mordiendolo suavemten y dejadno una marca rojiza que lamí suavemente con la punta de la lengua mientras con mis dos manos ahora sobre sus caderas le hacía moverse contra mi cuerpo en una perfecta imitación de lo que serían embestidas lentas sobre el escritorio.

ahh- solté un suspiro sin proponerlo, y sentí como mis mejillas se calentaban, genial, lo habia logrado, el mayor habia logrado sonrojarme, pero gracias a Dios, estaba algo oscuro, y el parecia ocupado con mi cuello, por lo que pensé que tal vez no lo notaría. sin embargo me alarmé con los movimientos que me hacia hacer, y senti que ahora mi cuerpo era el que se calentaba, el profesor estaba logran mas que una reaccion en mi, y curiosamente no me molestaba.

sonreí de lado cuando le escuché suspirar, damas y caballeros el premio al pervertidor es para HAendel Saint Claire...que curioso, ahora me importaba un cuerno aquel dichoso premio, simplemente me encargué de acelerar suavemente el movimiento de sus caderas y de las mías propias presa de una exitación bastante interesante.

deslicé mis labios por su cuello hasta terminar cerca del hueco de su hombro que volví a morder con suavidad para despues subir hasta su oido, lamí el lobulo de su oreja.

-parece que no te molesta para nada cierto?-dije entrecortadament y con la voz mas ronca de lo que me hubiese gustado mientras me mordía el labio inferior agradecido de que no pudiese verme.

le escuché, pero al parecer ya no pensaba muy bien, y mi cuerpo se movía solo, como si mi cerebro no tuviera ninguna clase de influencia en lo que hacia, puse mis manos en el hombro del mayor.

- creo que... no me molesta- acepté, cerrando los ojos y disfrutando de una forma extraña como sonaba la voz del mayor. Respiraba con dificultad y uno que otro suspiro salieron,a pesar de que intenté reprimirlos.

ciertamente esa respuesta no me la esperaba. Esperando que no detubiera aquel delicioso movimiento que ahora el mismo ejercía sobre su cuerpo despegé la mano derecha de su fina cadera en la que tan gustosamente se había instalado y que fue suviendo suavemente por su cintura colandose por debajo de la ropa del muchacho y acariciando el suave torso y el plano abdomen deteniendose en el pecho y acariciando suavemente uno de sus pezones.

-si contuamos así-susrré a penas audiblemente-seguro que terminamos cumpliendo con mi fetiche por completo-dije a sabiendas de que si mi propia exitación aumentaba seguro que violaba al muchacho.

Ah- solté otro suspiro que pareció mas un jadeo que otra cosa, el toque de la mano del otro hacia cosas extrañas con mi cuerpo, y lo mas raro era que yo lo disfrutaba, escuché lo que me dijo y sonreí divertido.

-dices eso, pero no pareces querer detenerte- le dije cerca de su oído, pues había inclinado la cabeza hacia el hombro del mayor.

-tu tampoco pareces querer que lo haga-sonreí ayudandome con la otra mano para levantar la prenda de ropa del muchacho, separé mi torso de su cuerpo por un sintante y me deshice de ella con un movimiento rápida para despues volver a inclinarme sobre su anatomía.

me hundí en su cuello y bese su clavicula deslizando ahora la lengua por piel y dejando un camino de saliva en el proceso para despues susittuir con mis labios el trabajo que anteriormente hacía mi dedo pulgar sobre el pezón derecho del menor antre mis brazos.

Mas que dejarle que me quitara la camisa, lo ayudé a hacerlo, incliné un poco la cabeza cuando regresó a mi cuello, manteniendo las labios entre abiertos.

-ah- jadie ante el contacto de su boca con mi pezón, sin importarme mucho ya que tipo de sonidos salieran de mi garganta, una de mis manos encontró camino hacia los cabellos del otro, enredándose en ellos. – la verdad, creo que soy físicamente imposible de detenerme a estas alturas- confesé.